Un ciudadano egipcio de 45 años, Mohamed Sabry Soliman, fue imputado este lunes por crimen de odio tras lanzar cócteles molotov contra manifestantes judíos en Boulder, Colorado. El ataque, según el fiscal federal interino J. Bishop Grewell, podría derivar en cadena perpetua. Soliman también enfrenta múltiples cargos estatales por intento de asesinato, luego de herir a una docena de personas, dos de ellas de gravedad.

El agresor usó gasolina y un rociador como lanzallamas

El hecho ocurrió durante una manifestación pacífica en apoyo a los rehenes israelíes retenidos por Hamas. Soliman lanzó cócteles molotov y utilizó un rociador agrícola cargado con gasolina, adaptado como lanzallamas. “Quería que todos murieran. No mostró remordimiento y dijo que lo volvería a hacer”, afirmó el fiscal Grewell. Entre los heridos había personas mayores de 80 años.

La policía local encontró en el lugar del ataque otros 16 artefactos explosivos listos para ser usados. También hallaron una mochila con más gasolina, lo que, según el fiscal del distrito de Boulder, Michael Dougherty, demuestra un alto nivel de planificación. “Eso habla por sí solo”, expresó.

Había planeado el crimen de odio con un año de anticipación

Durante su declaración, Soliman admitió haber planeado el ataque al menos un año antes. Inicialmente intentó adquirir un arma de fuego, pero al no ser ciudadano estadounidense no pudo concretar la compra. Fue entonces cuando recurrió a métodos incendiarios. Las autoridades revelaron que ingresó a Estados Unidos en agosto de 2022 con una visa de turista que venció en febrero de 2023. Aunque solicitó asilo en septiembre de ese año, su situación migratoria seguía siendo irregular al momento del ataque.

Videos grabados por testigos muestran a un hombre sin camisa gritando “¡Mueran sionistas!” y “¡Son asesinos!” mientras el fuego se extendía en el césped. En una de las grabaciones se lo escucha insultando a los manifestantes antes de ser reducido por la policía. El hecho ocurrió durante la festividad judía de Shavuot, lo que agravó el impacto del atentado.

El ataque desató críticas políticas y condenas internacionales

Desde Nueva York, el embajador de Israel ante la ONU, Danny Danon, condenó el atentado. “El terrorismo contra los judíos no se detiene en la frontera con Gaza, ya está incendiando las calles de Estados Unidos”, expresó. El presidente Donald Trump también reaccionó desde su red Truth Social. “Este ataque NO SERÁ TOLERADO”, escribió, y criticó las políticas migratorias de su predecesor Joe Biden.

Por su parte, el actual secretario de Estado, Marco Rubio, advirtió: “Todos los terroristas, sus familiares y simpatizantes que se encuentren aquí con visa deben saber que los encontraremos, les revocaremos sus permisos y los deportaremos”.

El proceso judicial continuará esta semana en Boulder, donde Soliman enfrentará los cargos federales por crimen de odio con intento de asesinato, además de múltiples cargos estatales vinculados al uso de explosivos. Si es hallado culpable, podría recibir cadena perpetua, además de cientos de años de prisión por los delitos estatales.