Todavía no empezó la temporada de la Liga Argentina de Básquetbol y, por lo que pudo verse anoche en el estadio Nuevo José Martínez, nadie estará dispuesto a resignar un centímetro en la búsqueda del ascenso. Así quedó expuesto en el partido que Quilmes ganó ante Ciclista Juninense, por 86 a 78, y que de
Todavía no empezó la temporada de la Liga Argentina de Básquetbol y, por lo que pudo verse anoche en el estadio Nuevo José Martínez, nadie estará dispuesto a resignar un centímetro en la búsqueda del ascenso.
Así quedó expuesto en el partido que Quilmes ganó ante Ciclista Juninense, por 86 a 78, y que de amistoso no tuvo demasiado.
Se jugó con dientes apretados, al límite, casi como si hubiera sido por los puntos. Y no estuvo mal, más allá de algún exceso que podría haberse evitado. El comienzo del certamen está a la vuelta de la esquina y nadie quiere dar ventajas.
El “tricolor” se encontró con una dura oposición defensiva, y todo lo que había resultado más sencillo y fluido ante Villa Mitre, costó mucho más ante los juninenses.
Ciclista arrancó con ventajas cómodas de 9-1 y 12-3, reflejando una superioridad manifiesta. Al local no le entraban los tiros lejanos, tampoco podía jugar interior y, del otro lado, Damián Tintorelli fue una gran complicación durante casi todo el primer tiempo.
En la medida en que calibró su tiro a distancia, Quilmes mejoró adelante pero le costó afirmarse atrás, y la visita anotó 50 puntos en la primera mitad.
El partido sirvió, también, para el retorno a la acción de Juan Esteban De la Fuente luego de su desgarro y también para el debut de N’Tio Diarra. Fue apenas el primer contacto con su nuevo equipo. Cumplió atrás (a Tintorelli lo defendió bien) pero mostró algunas limitaciones adelante. Hay que darle tiempo.
El equipo de Javier Bianchelli arrancó muy enfocado el tercer cuarto, enseguida limó la desventaja de 10 puntos pero el juego se ponía cada vez más áspero, y luego de un encontronazo entre De Miguel y Salazar se originó un tumulto que involucró a varios. Calmados los ánimos y tras las faltas técnicas y antideportivas de rigor, el partido retornó a su cauce normal.
Y allí emergió mejor el local. Con Joaquín Ríos encendido (ya se va metiendo a la gente en el bolsillo), un más participativo Darry Moore, los recursos de Pablo Alderete y apariciones puntuales de De la Fuente. Más la lógica superación defensiva (sólo permitió 28 puntos del rival en el complemento). Un buen ensayo para aprender a salir de las dificultades y emerger airoso. La próxima presentación ya será por los puntos.
La síntesis
Quilmes 86
S. Ludueña 10, F. De Miguel 3 (x), J. Ríos 20, D. Moore 16 y P. Alderete 18 (FI). J.E. De la Fuente 16, L. Luna 2, N. Diarra 1, M. Dominé 0, R. Giacone 0. DT: Javier Bianchelli.
Ciclista Juninense 78
V. Costa 8, F. Lombardi 12, L. Herrera 7, T. Pereyra 14 y D. Tintorelli 18 (FI). O. Ferreira 6, P. Di Prinzio 7, J. Salazar 6, S. Villa Toro 0, F. Pagura 0. DT: Julián Pagura.
Estadio: Nuevo José Martínez, de Quilmes.
Árbitros: Nahuel Casalot y Diego Cortellino.
Parciales: 17-25, 40-50 y 63-68.
















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