Quilmes de esta ciudad decidió no seguir adelante las tratativas con el interno Zondrick Garrett y confirmó la contratación del estadounidense Darry Moore como refuerzo para la próxima Liga Argentina de básquetbol.

Moore, interno de 2.01 metros y 24 años, llega con el aval de una buena incursión en la última Liga Argentina en Estudiantes de Tucumán.

En el conjunto norteño el estadounidense disputó 32 encuentros y consiguió promedios de 17,5 puntos (61,2% en dobles, 32,2% en triples y 69,6% en libres), 4,7 rebotes, 1,2 asistencias y 33,3 minutos.
Moore se graduó en su país en la East Texas Baptist University y antes de jugar en Estudiantes de Tucumán tuvo un paso por Félix Pérez Cardozo, de Paraguay.

Su llegada cierra un cambio de orientación en los planes iniciales del DT Javier Bianchelli, quien en un principio tenía en mente un equipo bajo, veloz y muy versátil con Ludueña, Eidintas, Ríos, De la Fuente y Alderete.

Ahora, en cambio. Ríos se correría a la posición del “2”, “Juane” lo haría a su posición natural y entre Moore y Alderete se repartirían las funciones interiores para conformar una formación más alta y fuerte.

Federico De Miguel, un base pequeño pero con gran poder de gol, sería el recambio para las posiciones de “1” y “2” y, en consecuencia, para finiquitar el proceso de formación del equipo a Quilmes sólo le falta incorporar un interno de recambio.

En ese sentido, interesa el potente ala-pivote ecuatoriano Abraham Barahona, de 22 años y 1,95 metros, integrante del equipo campeón de la pasada temporada: Racing de Chivilcoy.